Cuando seres conscientes se unifican para hacer un llamado, ya sea de manera presencial o virtual, estarían dando un cambio y desactivando las antiguas posiciones y emanaciones que dan ciertos comportamientos para activar en un colectivo las nuevas formas de dirigirse a un estado más elevado de consciencia, es decir otras creencias dejan de estar activadas para que se vaya adentrando otro nivel del juego pues la humanidad ya está preparada para recibir otras formas más evolutivas 

El llamado a Guatemala es para procesar las descargas y reactivar las pirámides localizadas en este país, sobre todo ahora cuando el planeta ha dado un salto cuántico, es decir, cada vez que se realiza un cambio a nivel político o en el colectivo de alguna manera ciertos programas permiten desactivarse, permitiendo la descarga de programaciones distintas. Otros nodos diferentes y nuevos necesitan ser procesados por consciencias más elevadas que al vibrar desde un estado presente de enfoque y trabajando a nivel multidimensional, harían que se procesase toda esta información detalladamente para poderla comunicar a nivel de experiencia para el colectivo en todo lo que representa una nueva línea de tiempo. 

Cada pirámide sirve de detonador, porque todas están conectadas entre sí y esto es lo que Empieza a activar las bases de lo que representa cada civilización, porque hay maquinarias sobre todo en los vórtices de energía. Las pirámides son antenas que se activan con el estado de conciencia de los representantes que acceden a ellas con la intención de reactivar la red, por eso cada activación de códigos estaría trabajando por ese llamado generando un código en concreto, que permitirá hacer ese registro y reafirmar que ha sido, por decirlo así, “la Misión Cumplida”.